¡Una acción con mucho amor! Maestro llevó a sus estudiantes por primera vez al cine
Actividades que en otros escenarios se convierten en parte de la rutina o de un conjunto de situaciones que podemos vivir sin problemas, para otros pueden ser grandes misterios que deben esperar por descubrir. Este fue el caso de un grupo de estudiantes que cumplirían su ilusión de ir por primera vez al cine.
Leer esta historia te permitirá volver a creer en el noble corazón de los seres humanos y su poder para alegrar la vida de otros. ¿Estás listo?
Por primera vez al cine: ¿cómo nace esta bella historia?
Nuestro gran evento tiene lugar en una zona rural de Chiquimula, en Guatemala. Allí, una escuela pequeña reúne cada día estudiantes de distintas edades con muchas ganas de aprender y descubrir el mundo. Sin embargo, sus vidas también corren en medio de adversidades.
La Escuela rural mixta, sede donde se reúne el maestro Edwin Linares con sus alumnos, está ubicada en una de las zonas más precarias de la región. Allí la vida no es nada fácil y llegar a clase tampoco es un proceso sencillo, pues algunos de ellos deben caminar hasta dos horas para asistir.
Bajo este panorama, ir al cine no es una prioridad, pero tampoco una opción posible, a menos a corto plazo. Es por ello que este maestro, con todo el amor que le profesa a sus estudiantes, se propuso cumplir su sueño.
La llegada del gran día: ¡todos adentro para ver la gran pantalla!
Decidido a llevar a sus estudiantes por primera vez al cine, Linares se propuso reunir los fondos necesarios para alcanzar la ilusión de los pequeños. Así lo reconoció el medio SDP Noticias, quien entregó detalles de esta dulce historia.
Para cumplir su cometido, el maestro compartió una publicación en su cuenta de Facebook, donde solicitó donaciones, señalando que con estos recursos llevaría a los niños por primera vez al cine. Allí, invitaba a los usuarios a apadrinar a un niño y regalarle una entrada, alimentación y visita a un balneario.
Pronto, la iniciativa tuvo respuestas, pues en muy poco tiempo, mucho antes de lo que el mismo maestro se imaginaba, los corazones de los usuarios se hicieron sentir, comentando y ayudando en la gestión.
De esta manera, Linares tuvo los recursos necesarios para llevar a los pequeños a disfrutar de una película en la pantalla grande. Pero también pudo trasladarlos en un vehículo, una medida importante para que los niños llegaran tranquilos y en las mejores condiciones al lugar.
La ilusión que logró ocultar por un momento las dificultades
Linares aprovechó la situación para dar a conocer las condiciones a las que se enfrentan los niños, pues el medio conoció que el maestro resaltó las necesidades que tenían los niños en la escuela.
Señaló que las instalaciones donde reciben clases los niños están lejos de tener una buena infraestructura, pues no todos los sanitarios cuentan con puertas, falta un espacio para la atención médica e incluso los niños están en riesgo por la ausencia de un muro de contención.
Sin duda, estos pequeñitos recordarán la increíble labor de su maestro para siempre, pero nosotros también necesitamos recordar las necesidades que viven y cuya voz podemos fortalecer juntos, para exigir mejores condiciones para ellos.